En computador o consolas, un gamer profesional chileno puede llegar a ganar 5 millones de pesos mensuales. Habilidad y más de cuatro horas de entrenamiento diarias son parte de los requisitos que deben cumplir quienes planean convertirse en expertos.
Por Carolina Pedreros
Con una bandera chilena en la espalda, un joven moreno de veinte años está sentado en silencio frente a la pantalla amarilla de un computador. Se acomoda sus audífonos blancos y luego se inclina hacia la pantalla, la que está proyectada en formato gigante en el escenario del Movistar Arena. El joven aprieta sus puños, toma el mouse con su mano derecha y posa la izquierda sobre el teclado. “Vamos Olimaclan, queremos oro”, le gritan algunos espectadores. Entonces, el caster –o relator del evento– da la partida y comienza a narrar la final para elegir al campeón del videojuego Fifa 12 en el World Cyber Games Chile 2012, en la que el chileno Olimaclan se enfrenta al mexicano Lord FeGriZ.
Cuando tenía seis años, la vida gamer de Camilo comenzó con el videojuego Fifa 98. A los 12, creó el avatar Olimaclan –palabra que viene de su nombre escrito al revés, e incluye la palabra “clan” al final–, el primer requisito para ser jugador de un e-sport o deporte electrónico. Desde 2003 Camilo empezó a participar en competencia online y también en campeonatos presenciales en vivo, como el World Cyber Games (WCG) del Movistar Arena.
En Chile, hoy los ciberatletas son independientes, pues no existen auspiciadores que les paguen por jugar a diario para promocionar sus marcas en campeonatos, cuestión que ya ocurre en países que llevan la delantera en la materia, como China, Alemania y Corea del Sur. Sin embargo, Camilo Lara –uno de los jugadores chilenos más destacados en el presente–, es capaz de ganar 2000 dólares en un torneo que dura sólo un fin de semana.
“Pero no todo es dinero”, dice Camilo, “tengo una página que se llama fifapro.cl en la que se reúne mucha gente para jugar. Hablamos on-line y hasta nos juntamos en asados”.
Jugar en serio
El director ejecutivo del campeonato WCG Chile, Brad Lee, cree que hoy existe un alto nivel de jugadores en nuestro país y que, más allá, se avizora un futuro prometedor. “Pienso que los gamers profesionales van a crecer rápidamente en Chile. El país será sede de unos juegos panamericanos y, además, mucha gente ya se está dando cuenta de que los e-sport son tan emocionantes como el fútbol real”, dice.
Si bien los gamers nacionales todavía se juntan para “tarrear” –reuniones en que se organizan alrededor de varios computadores conectados entre sí para jugar–, Nicolás Blanche, creador del sitio web ciberdeportes.cl, cuenta que estos eventos están pasando de moda y que las competencias grupales se están desarrollando en tiempo real a través de portales especializados en la web. “La industria se ha complejizado y se están replicando modelos más competitivos y profesionales”, comenta Blanche.
Sobre los ciberatletas, Matías Fernández, creador de la web tarreo.com, destaca que su número crece día a día en Chile. En las ligas más establecidas –como la Liga Samsung–, dice, hay alrededor de cinco mil jugadores semi-profesionales, los que le dedican más de cuatro horas al día a practicar. Más allá del tiempo invertido a diario, para Fernández las características principales del ciberatleta incluyen la pasión y gran capacidad para entender la mecánica de los juegos. “Se debe también tener la capacidad de trabajar en equipo, la verdad es que todo radica en la capacidad del trabajo colaborativo”, explica Fernández.
Estilo profesional
Pero no todo es juego en el camino de un gamer para convertirse en profesional en Chile. Además de pasar muchas horas al día frente a una pantalla, se debe trabajar duro para conseguir auspiciadores permanentes, quienes son los que finalmente permiten dedicarse por completo al rubro. Eso, en paralelo a ser capaz de auto-administrar una carrera, pues en el país aún no hay representantes especializados que manejen a ciberatletas.
Brad Lee, director ejecutivo de WCG Chile, aclara que para el desarrollo de una carrera profesional es muy importante que los auspiciadores apoyen las competencias. “Los jugadores profesionales son muy importantes para el desarrollo de la industria. En las competencias, que cada día atraen a más público, ellos pueden hacer promoción a través de su experiencia, explicando cada uno de los juegos de manera directa a las personas que asisten”, dice Lee.
En el mundo, según cifras de la consultora Gartner Inc, la industria de los videojuegos generará 115 mil millones de dólares anuales para el 2015. Con ese panorama, según los expertos, los gamers profesionales serán una pieza clave para conseguir más fanáticos.
Como el público que, finalmente, aplaudió el triunfo de Camilo Lara sobre el mexicano Lord FeGriZ en la final de Fifa 12, que se realizó en agosto pasado en el marco de la última versión del WCG Chile.
“Yo no juego para perder, juego siempre para ganar”, dijo Camilo aún eufórico después de conseguir el triunfo, pensando en su próxima participación en el campeonato mundial WCG que se realizará en Kunshan, China, entre el próximo 29 noviembre y el 2 de diciembre. Al menos él, dice Camilo, es la prueba de que los gamers chilenos ya están llegando lejos.