A pesar del aumento exponencial de casos de cáncer de piel a nivel mundial, en redes sociales proliferan modas que rechazan los beneficios de los bloqueadores solares, promoviendo una peligrosa filosofía. Los expertos advierten que este negacionismo no es solo irresponsable, sino también mortal.
Por: Sofía Martínez
Edición: Antonia Ossandón
https://vm.tiktok.com/ZMk2tbVhb/
Más de 91.6 mil personas han usado el audio “Burn it” en TikTok, un extracto de la serie “The Vampire Diaries” donde la protagonista le pide insistentemente al fuego que la queme y la consuma. En estos videos, miles de jóvenes aparecen con un bronceado exageradamente oscuro y cubiertos en aceite, exponiéndose directamente al sol y suplicándole que los queme, todo al ritmo del audio.
Rayz App, aplicación para smartphones que da consejos y envía recordatorios para tener el bronceado perfecto, notifica: “Hay un índice UV de 13, ve a tomar sol, agradécemelo después”. Esta App incita a los jóvenes a mostrar sus progresos en el bronceado, realiza un análisis de los cambios en su tonalidad y les recomienda aceites bronceadores. También sugiere postear fotos de sus marcas de bronceado en el traje de baño y avisa, mediante notificaciones, cuándo el índice ultravioleta está alto para aprovechar su potencia.
Estos comportamientos en redes sociales van en contra de las recomendaciones de las entidades de salud a nivel mundial, que hoy advierten sobre los riesgos de la exposición excesiva al sol y promueven prácticas de protección solar para prevenir daños en la piel.
El diario español especializado en información sanitaria y salud Gaceta Médica estima que, para el año 2030, se producirá una “epidemia de cáncer cutáneo” debido al aumento de los casos a nivel mundial. En esta línea, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que uno de cada diez chilenos desarrollará cáncer de piel, y que el 80% de estos casos estarán relacionados con la exposición prolongada e irresponsable al sol. Esta situación da origen a dos tipos principales de cáncer cutáneo: los melanomas, que representan la forma más grave y se producen por el crecimiento descontrolado de los melanocitos; y los carcinomas, que se originan en las células epiteliales que recubren la piel o los órganos internos.
Sin embargo, en la comunidad médica existe una creciente preocupación por la proliferación en redes sociales de ideas sin sustento científico, que responsabilizan a los bloqueadores y protectores solares del cáncer de piel.
Argumentos infundados, como la supuesta disminución de la vitamina D y la presencia de sustancias nocivas en su composición, son algunas de las razones que los defensores de esta postura esgrimen. Este peligroso discurso, reiterado entre miembros de la Generación Z, mantiene en alerta a especialistas que continúan recomendando el uso de protección solar como medida esencial para prevenir el daño cutáneo y el cáncer de piel.
“Yo era de las que se ponían a las 12:00 del día a tomar sol, sin parar, hasta que se me marcaran las líneas del bikini”, dice Pauline Hargous (34), sobreviviente de un melanoma que le detectaron durante un chequeo dermatológico.
“El tono de piel más sano siempre será el natural… cualquier bronceado o quemadura en la piel es signo de una piel dañada”, afirma Andrés Figueroa, médico cirujano y especialista en dermatología de la clínica Universidad de Los Andes. De manera que suena como un discurso memorizado, expone: “Solo quince minutos de exposición al sol entre las 10:00 y 16:00 horas —cuando el índice UV es más alto— son suficientes para que el cuerpo absorba rayos ultravioletas, aumentando nuestro riesgo de desarrollar un cáncer de piel para el futuro”.
Para el especialista, los rayos UV siempre son dañinos y las personas deben ser advertidas sobre sus riesgos. “Lamentablemente, son solo las personas dentro del 80% que han contraído un carcinoma o melanoma, aquellas que realmente se protegen de la acumulación de estos rayos”, dice. “Los primeros 20 años de vida son clave. Después de esos años ya estamos con la suerte echada, por eso hay que concientizar a los niños y jóvenes sobre el cuidado de la piel para dar vuelta estos índices”, agrega.
Cruzada histórica de la comunidad médica
El problema de las modas perjudiciales para la salud que se viralizan en redes sociales, es la falta de contrapeso de voces expertas que adviertan sobre sus riesgos.
“Lamentablemente, la comunidad médica no está en Instagram. Por lo que pareciera que estamos en un mundo paralelo alertando cosas a un público que no escucha”, dice la dermatóloga pediátrica, Daniela Kramer, que actualmente atiende en su consulta privada en Vitacura.
Según Kramer, es crucial alertar a los menores de veinte años sobre los daños del sol, porque son los rayos acumulados durante esa etapa los que determinarán si se desarrolla un cáncer a la piel o no.
Sin embargo, el mundo digital promueve algo distinto. “No me hacen caso hasta que les digo a las niñas que les saldrán arrugas si no se protegen del sol”, dice Kramer. “Vivimos en un mundo donde se pone en primer lugar la apariencia y lo que es socialmente aceptado como belleza, no la salud”, agrega. Si hoy en Chile se venden cigarrillos con una advertencia que alerta a sus consumidores sobre el cáncer pulmonar, la doctora Kramer propone que algo así se haga en la venta de productos cosméticos como aceites bronceadores y aceleradores de bronceado. “Son cáncer en botella”, dice.
Los bronceadores son productos cosméticos diseñados para realzar o acelerar el proceso del bronceado de la piel durante la exposición al sol ya que estimulan la producción de melanina, el pigmento responsable de oscurecer y proteger la piel. Sin embargo, el uso de bronceadores sin una protección solar adecuada puede ser perjudicial, ya que la piel queda expuesta directamente a la radiación ultravioleta (UV), aumentando el riesgo de desarrollar melanoma o carcinoma. Actualmente, estos productos se comercializan ampliamente en supermercados y farmacias del país, lo que resulta preocupante debido a su fácil acceso para todo público y la falta de restricciones o advertencias claras sobre sus potenciales daños en la salud.
“La cantidad de energía que llega a la superficie de la Tierra puede variar por factores internos como cambios en la dinámica atmosférica, el estado de la capa de ozono y la presencia de otros componentes que interactúan con la radiación”, dice Eliana Moath, funcionaria de la Dirección Meteorológica de Chile (DMC). Además, la suma del deteriorado estado de la capa de ozono y la dinámica atmosférica han acelerado el proceso de captación de los rayos solares de manera gradual en la piel humana, a pesar de que la energía solar ha disminuido en los últimos años, lo que muestra el carácter acumulativo de los rayos ultravioleta en nuestra piel. “Acumulación que, al no ser inmediata, no es tomada en cuenta por las personas”, dice la doctora Kramer.
De acuerdo con un artículo publicado en la revista científica Bulletin of the American Meteorological Society en 2023, Chile alberga el punto con la mayor radiación solar registrada en el mundo: el desierto de Atacama.
En este contexto, la comunidad médica se ha mostrado tajante en la cruzada para advertir los daños del sol, especialmente frente a la desinformación que cunde en redes sociales.
“La noticia falsa siempre va a llegar mucho más rápido que la verdadera, porque es más atractiva”, dice la doctora Kramer. “Con solamente 10 minutos al sol a las seis de la tarde hidroxilamos toda la vitamina D que necesitamos, por lo tanto, queda corto el argumento que dice que los bloqueadores nos quitan la vitamina D”, agrega.
“El aporte de la protección solar está comprobado y es muy importante para prevenir cánceres que terminan en la muerte”, dice el doctor Figueroa respecto a la desinformación sobre los daños de los protectores solares en la piel.
De la ignorancia al autocuidado
Para hacer frente al discurso digital, la normalización del bronceado y el fanatismo por la exposición al sol, la comunidad médica y los sobrevivientes de cáncer se pronuncian. Este es el caso de Pauline Hargous, quien a raíz de su experiencia personal comenzó a promover una exposición solar sana, responsable y consciente de los riesgos de contraer cáncer cutáneo. Así nació Lilum Cosmetics, una pequeña marca de autobronceadores que busca ofrecer una solución segura a las personas que desean estar bronceadas sin recurrir a la exposición prolongada al sol. “Si el mundo fuera perfecto, todos estaríamos conformes y seguros con nuestro tono de piel. Pero mientras no sea así, los autobronceadores —que no requieren de exposición al sol— son una mejor opción”, afirma.
Al igual que Hargous, María Elisabeth Guesalaga, directora de Mujeres por un Lazo, fundación que busca concientizar y apoyar a mujeres con cáncer, insta a cambiar el estereotipo que asocia la piel bronceada con la belleza. “Es penoso ver cómo las mujeres nos complicamos por la idea de un verano sin tomar sol, por la inseguridad de no estar bronceadas, cuando lo más sano es justamente lo contrario”, señala.
“No dejamos de repetir: bloqueador cada tres horas, ropa protectora y evitar la exposición directa al sol entre las once de la mañana y las cuatro de la tarde”, afirma el doctor Figueroa.
El especialista recomienda aplicar la cantidad adecuada de protector solar en las diferentes zonas del cuerpo: “Para la cara, una cucharadita; para el cuerpo, una cucharada sopera”. Además, subraya la importancia de realizarse un control dermatológico al menos una vez al año, especialmente si hay antecedentes familiares de cáncer cutáneo, y de revisarse la piel periódicamente para detectar a tiempo posibles carcinomas malignos.
“La detección temprana de un cáncer puede salvar vidas. Seguir las indicaciones y precauciones de los médicos sin duda me ayudaron a mí”, dice Hargous con una sonrisa al hablar de su recuperación, como si fuera otra mujer la que en el pasado se exponía durante horas al sol cada verano
https://vm.tiktok.com/ZMk2tuXTV/
https://vm.tiktok.com/ZMk2tuXTV/
….
Sofía Martínez es estudiante de tercer año de periodismo en la fcomuc. Actualmente es ayudante de Narración de No Ficción y del Test de Actualidad IA y es editora del kmcero. Es su primera vez publicando en un medio.
Excelente artículo para concientizar el peligro de la exposición solar sin protección. Me gustó la claridad y documentación del reportaje con el apoyo de distintas fuentes que dan confiabilidad a la exposición.